ALPINA STARTIMER PILOT CHRONOGRAPH BIG DATE.

Cada vez que me subo en un avión me asaltan siempre las mismas preguntas. Tipo de avión (Boeing, Airbus...), seguridad de la aeronave, autonomía de vuelo...por lo que respecta a la máquina.

Pero nunca falta otra pregunta: ¿quién estará al mando? y... no os lo váis a creer (o tal vez sí): ¿qué reloj llevará en la muñeca?. O sea, que sentado en el asiento poniéndome el cinturón acabo pensando en Breitling, IWC o Rolex... bonita manera de calmar la ansiedad ¿verdad?.

Termino fantaseando con que algún dia, quizás, pueda disfrutar de uno de esos... Aunque, ¿realmente es necesario gastarse cinco mil euros para sentirse como un comandante de línea aérea al menos en lo referente a nuestro reloj?. Creo que esta fotografía puede despejarnos algunas dudas:

 

Este es el reloj que utiliza el comandante Yilmaz de la aerolínea Turkish Airlines. Para quien no la conozca, Turkish fue considerada en 2013 como la mejor aerolínea europea, la séptima a nivel mundial y la única no asiática entre las diez primeras. De acuerdo, esto no quiere decir absolutamente nada a cerca de la pericia del comandante Yilmaz ni de su acierto al elegir reloj...

Bromas aparte, la foto que os muestro y que aparece en el muro de Facebook de Alpina, despertó mi curiosidad acerca del reloj. A Alpina le pasa un poco como a Turkish. Es una firma un tanto desconocida, minoritaria, que sorprende cuando te enteras de que es una de las pocas manufacturas suizas, esto es, tiene capacidad de fabricar "in-house" sus propios calibres automáticos.

Ahora bien, por lo que se ve, el comandante Yilmaz opta por un cuarzo de esta compañía. Otra curiosidad que aumentó mi interés por el reloj en cuestión.

Se trata del Startimer Pilot Chronograph Big Date y puedo aseguraros que es uno de los pilots estéticamente más equilibrados de los últimos tiempos... tanto que podría rivalizar en ese aspecto con algunos IWC. Fue presentado hace algo más de un año en la feria de Basel de 2013.  

La colección Startimer esta compuesta por cinco "familias": pilot automatic, pilot classic, pilot heritage, pilot manufacture y la última de ellas, pilot "a secas" a la cuál pertenece este big date.

Antes de continuar, un dato que a los más puristas tal vez no agrade: el reloj porta un calibre de cuarzo que Alpina denomina AL-372, sobre base Ronda, de alta precisión (no he podido confirmar si se trata de un calibre termocompensado, aunque podría asegurar que no lo es...). Llegamos así a la eterna discusión de cuál es la máxima cantidad que se debe pagar por un reloj de cuarzo...

Tal vez la respuesta debamos buscarla en la calidad de acabado y el acierto estético. Y creo poder afirmar que por lo que se aprecia en las fotografías disponibles este Alpina esta bastantes escalones por encima de la media en esos dos apartados, con respecto a otros cronógrafos de cuarzo del mercado.

La caja de acero, disponible también en acabado PVD negro, tiene 44 mm de diámetro. El reloj esta disponible con dial negro o azul petróleo, con dos tipografías ligeramente diferentes, ya que las referencias AL-372BGR4S6 y AL- 372GR4FB6S muestran unos acumuladores un poco más pequeños que no "muerden" los numerales 5 y 7 y además ofrecen un aspecto más vintage al incorporar un carril de minutería externa al dial y en cada contador en "chemín de fer". Además los marcadores y numerales arábicos tienen una coloración tostada en esos dos modelos.

Ref AL-372BGR4S6

El reloj viene dotado con correa de piel o sintética de tipo canvas. La caja presenta un bisel pulido y el resto va acabada a cepillo. La corona, característica de la colección Startimer, en forma de diamante, es uno de los elementos diferenciadores del reloj, junto a los pulsadores start/stop y reset de cabeza cilíndrica. 

A las 6, doble ventana del fechador (big date) que sustituye al numeral en esa localización y que representa otro de los elementos estéticos del reloj.

En la tapa trasera, la compañia ha realizado el gravado de un jet de la firma Cessna, de la cuál Alpina es suministrador oficial de relojes.

El reloj acredita una resistencia al agua de hasta 10 atmósferas (100 metros). 

Y para el final, el precio. De tarifa, 990 francos suizos, que vienen a equivaler a unos 800 euros. Sin duda mucho dinero para un cuarzo, si bien la calidad de acabado esta fuera de toda duda, al igual que la posibilidad de confundirlo sobre muñeca con un IWC gracias a su estética muy lograda.

Para pensárselo muy bien y tomar una decisión tras verlo puesto bajo el puño de la camisa.

Algún enlace de interés:

http://www.alpina-watches.com/

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