SPINNAKER PICCARD 2022.

 

Si no recuerdo mal, la británica Spinnaker ya presentó hacia 2020 un reloj diver con la misma denominación (Piccard) en edición limitada, caja de titanio o bronce y de filosofía muy similar a este que nos va a ocupar la presente entrada. 

Se trataba, como ahora, de ofrecer un diver de morfología (que no prestaciones) extremas y que, en la revisión que le dedicábamos en el blog ya le hacíamos determinadas críticas que vamos a comprobar si las mantenemos o rectificamos en su nueva iteración, recién presentada, y que ya no se trata e una edición limitada.

De inicio, he de decir que el Piccard 2022 es un reloj algo más "domesticado" que el presentado hace un par de años. En esta ocasión "solo" tiene un diámetro de caja de 45 mm con un L2L de 52 mm y 21 mm de altura. Sigue siendo un reloj enorme (más si tenemos en cuenta los cánones o tendencias actuales) pero que pierde milímetros (unos cuantos) respecto al modelo previo.

Por otro lado, aparentemente está bastante más trabajado en cuanto a diseño y acabados, abandonando un tanto el look de herramienta para acercarse un tanto al diver que muchos más aficionados pudieran vestir con relativa normalidad.

Sin embargo, no puedo decir que no tenga exactamente (y en mi opinión personal) el mismo defecto que el Piccard previo: la discordancia entre forma y función. Nace, como el anterior, con un objetivo más estético que operativo y, para sus dimensiones de caja, se queda en unas completamente habituales 55 atmósferas de estanqueidad (550 metros). No hace falta tanto burro para esas alforjas, recurriendo a la clásica expresión española.

Tened en cuenta que, por ejemplo, el Christopher Ward C60 Sapphire (un reloj que no acabo de sacarme de la cabeza) soporta 60 atmósferas de presión con una caja de 40 mm de diámetro y 12,95 mm de altura. 

Es, por tanto, un reloj masivo que recrea la estética de los diver extremos y se inspira en el Rolex Seep Sea Special que acompañó a Jacques Piccard y Don Walsh en su inmersión hasta 10.916 metros en la Fosa de las Marianas, el 23 de Enero de 1960. Su principal objetivo es rendir homenaje a aquellos personajes y a aquel Rolex, cosa que la propia firma reconoce en su página web.

Es también un reloj orientado a aquellos que gustan de vestir modelos muy contundentes, en este caso no tanto por diámetro de caja como por altura, a la que contribuye decisivamente un prominente cristal zafiro de tipo burbuja, que inevitablemente deforma la imagen de la esfera y sus componentes a partir de cierto ángulo de visión.

Hay disponibles tres opciones en cuanto a combos de color: esfera y bisel negros, azules o verdes (Volcano Black, Dark Cerulean y Hunter Green son las respectivas denominaciones).

En cuanto al calibre seleccionado, se trata de un básico TMI NH35 de origen Seiko, uno de los más ubicuos entre los modelos de acceso de multitud de microfirmas. Andará un poco perdido dentro de esa inmensa caja así que supongo que irá acompañado de una bata más que generosa. Como sabéis, no es un mal calibre, sobre todo si la firma le dedica un mínimo de tiempo para su ajuste.

La tapa posterior es ciega e incorpora el grabado de un segmento de un artefacto marino que, supongo, se trata del famoso batiscafo Trieste, aunque no puedo asegurarlo. En la imagen se aprecia igualmente la válvula de escape de helio en la carrura izquierda del reloj.

Trae como dotación un brazalete metálico de tres eslabones totalmente cepillados y estructura ovalada con cierta inspiración más de Omega que de Rolex. 

Lo que no puedo reprochar a este reloj, ciertamente, es un precio desorbitado, porque 430 libras esterlinas son razonables para un diver automático sumergible hasta 550 metros, con bisel cerámico y válvula de helio. Por ello, lo considero un reloj interesante para todo aquel que guste de portar modelos sobredimensionados y que esté dispuesto a sacrificar algo de comodidad sobre muñeca. 

https://spinnaker-watches.co.uk/

Manteneos seguros, cumplid las normas sanitarias, usad siempre mascarilla en los espacios públicos, respetad la distancia de seguridad y sed escrupulosos en el lavado frecuente de manos. Es por vuestra salud y por la de los demás.