SEIS VIAJES, SEIS RELOJES.

¿Hay ganas de vacaciones?. Seguro. Se acerca el verano y va siendo hora de preparar (si aún no lo están) esos días de descanso tan merecidos. Así que me he tomado la libertad de escribir esta entrada. Seis lugares apetecibles y los correspondientes relojes para acompañarnos.

Por supuesto que es una selección subjetiva tanto de destinos como de modelos, aunque trataremos de dar algún tipo de justificación del porqué de unos y otros. Vaya por delante que quizás sólo exista un reloj "viajero" universal, y posiblemente sea el indestructible G-Shock... asequible, robusto y con todas las funciones que podamos necesitar e imaginar, sumergible y fácilmente reemplazable. Lo pone muy difícil para la competencia...

Rio de Janeiro... y sus Olimpiadas.


Indudablemente, siempre un imán turístico y este verano aún más, con las Olimpiadas 2016 a la vuelta de la esquina. Y aunque se presupone que las medidas de seguridad serán extremas, sigue sin ser el lugar ideal para lucir un Rolex según en qué zonas...

Villa Olímpica de Rio de Janeiro.

... así que nos vamos a decantar por el Casio Edifice EFR-505D-8AVEF. Asequible y discreto, con función cronografo (aunque sólamente 1/1 segundos), sumergible hasta 10 bar:

Y por supuesto, perfectamente "prescindible" en caso de extravío o sustracción. Su precio en página web de la firma es de 99 euros.


Ahora bien, quien vaya a presenciar la final de los 100 metros lisos y no tema por la seguridad (la suya y la del reloj), sin duda su elección es el Longines Conquest 1/100th en cualquiera de sus presentaciones. Una máquina increíble de cuarzo con capacidad de medir hasta la centésima de segundo... posiblemente de lo mejor en termocompensados a día de hoy.

Isla de Re, Francia...



Es el lugar de concentración de la Selección Española de fútbol para la Eurocopa 2016 de Francia. ¡Esperemos que les dé suerte! Una isla atlántica frente a La Rochelle, conectada al continente por un largo puente, tranquila (algo menos en verano, ya que multiplica por diez su población), con enormes arenales para disfrutar del mar y los deportes acuáticos y con una gastronomía excelente...

Impresiona de ser un lugar perfecto para dejar pasar las horas con calma, sin prisas, a la orilla del mar o sentado en una terraza en el puerto de su capital, Sainte-Marie-de-Re, degustando el plato típico local, las ostras.

Y si hay que dejar pasar las horas despacio ¿qué mejor reloj que un monoaguja?. Eso sí, que pueda entrar en el agua sin excesivos problemas...

... creo que el Ferro Distinct 2 que presentamos en el blog hace unas semanas cumple con casi todo lo que buscamos. Monoaguja, un diseño clásico y deportivo a un tiempo y 100 metros WR (uno de los pocos relojes de este tipo sumergible hasta esa profundidad).




El Algarve, Portugal... 



Una zona que conozco bien y a la que vuelvo siempre en busca de tranquilidad, amabilidad y excelente clima. Un lugar perfecto para relajarse, tanto más cuanto más nos alejamos hacia Cabo San Vicente o sobrepasamos aquel en dirección norte, a lo largo de la Costa Vicentina...

Playa de Burgau.

Ferragudo, El Algarve.

Este año mi intención es que me acompañe, si llega a tiempo, el Crepas Decomaster. Contundente y exclusivo, un reloj desde luego no para vestir con traje, sino más bien para disfrutarlo en verano en un lugar tan colorista como el propio reloj. Y sumergible... hasta 4000 metros (sin duda muchos más de los que voy a necesitar sentado en la terraza frente a mi mojito... incongruencias de esta afición).

  

No obstante, el Decomaster es una edición limitada de 303 unidades, todas vendidas... ¿Un plan B para El Algarve?. Tal vez otro diver lleno de color, como el Seiko SRPA21 PADI, a punto de comercializarse:

Ginebra, Suiza... 


Un destino urbano en el corazón de Europa... y un lugar peligrosísimo para los amantes de la relojería, por razones obvias. Asomada hacia uno de los lagos más grandes y bellos del continente, Ginebra es una ciudad pulcra y glamurosa, extremadamente elegante y casi costera (el Lago Leman me pareció de dimensiones bíblicas).

Y puestos a acercarnos hasta Ginebra, casi imposible abstenerse de entrar en alguna relojería, ¿verdad?. Así que necesitamos un reloj que, a poder ser, transmita cierto conocimiento de la afición (más que nada para que nos tomen un poco en serio).

Siempre leí en los foros que Sinn es una firma "muy de aficionado", más bien de gente "experta"... Claro que plantarnos en una relojería ginebrina con un reloj alemán (eso sí, con corazón suizo) también tiene su aquel. Nos vamos a arriesgar con el Sinn Frankfurt Financial District Watch 6068:

Un solo hora con fechador a las 4:30 y bisel interno, clásico y deportivo a un tiempo, de refinados acabados y perfecto para cualquier compromiso que se nos pueda presentar en la ciudad helvética...

Puede que el hipotético dependient@ de la relojería nos mire con mala cara (aunque lo dudo, ya que los suizos son personas muy educadas). En ese caso siempre podemos volver al día siguiente con un Junghans Meister Classic, otro reloj (alemán) al que veo desenvolviéndose perfectamente en esa ciudad tan bella:

Auckland, Nueva Zelanda... 


Se la conoce como la ciudad de los veleros, tal vez la de mayor tradición marinera de un país que ha vencido en la Copa América de Vela un buen número de ocasiones. Considerada también como la capital económica de Nueva Zelanda, es un destino perfecto desde el cual explorar el país...

Y aunque en los últimos años han proliferado (relativamente) las firmas de relojes neozelandesas, siempre a mi mente viene una de las pioneras, Magrette. Los primeros, los Regattare y Moana Pacific Diver, ya descatalogados, son difíciles de encontrar (aunque me siguen pareciendo de lo mejor de la firma)...

... así que tendríamos que elegir un modelo de la colección actual. Creo que en ese caso, elegiría el Magrette Moana Pacific Waterman, con la clásica caja cojín de la firma y el guiño a Seiko en su segundera de semáforo:

Cantabria, España...


Dicen de Cantabria, mi tierra, que combina a la perfección cualquier tipo de turismo que queráis realizar. De costa, rural o de alta montaña, las opciones en Cantabria son (casi) infinitas.

San Vicente de la Barquera

Laredo. http://www.robertoruizphoto.com/

Bahía de Santander, desde la playa de El Puntal.

 

Valles pasiegos.

A Cantabria estáis invitados a venir, con el reloj que gustéis... e incluso sin él. Os recibiremos bien... 

Como siempre, os recuerdo que si Tiempo Dinámico os resulta de ayuda, sólo tenéis que suscribiros al blog para recibir aviso inmediato de la publicación de cada nueva entrada.

En el lateral derecho de la página general encontraréis el desplegable con los botones "+1" y "subscribe".